Estas en un “nuevo espacio”. Constituite en su diseñador.
Se sienten los grandes cambios. Nada es igual. Todo necesita ser reciclado, transformado. Se
requiere de orden y de limpieza.
Hace espacio para lo nuevo, no permitas que la energía se bloquee. No acumules, quédate solo
con lo que es necesario y te representa en cada una de las áreas de tu vida. Que cada objeto,
prenda y que cada sujeto de tu entorno, hable de vos y de tu modo.
¿Cuál es la conciencia que tenes acerca de tu cuerpo?
¿Lo cuidas? ¿Lo haces a diario? ¿Sostenes el cuidado y la apreciación de tu cuerpo físico?
Elevate en este momento por encima de las viejas formas para poder detectar aquello que ya
no te sirve. Observa tus formas de pensamiento entendiendo que el pensamiento es energía
manifestada.
Observa si entre tus pensamientos y creencias hay ideas basadas en el miedo, la carencia y el
estancamiento.
Aprende a mirarte y a saber de vos.
Viví la experiencia de conocerte en todas las disciplinas. Todas ellas te mostrarán diferentes
aspectos para ampliar tu campo de conocimiento acerca de tu energía. (Diferentes terapias
clínicas, psicoanálisis, astrología, constelaciones familiares, registros akashicos, decodificación,
etc)
Liberate de todo lo que no te sirve en cada área de tu vida.
Aprende a ser un buen seleccionador de energía.
Entendé que en todo aquello que hagas foco, crecerá. Fijate bien qué es lo que queres hacer
crecer.
Lo que no tiene nombre ni forma, no tiene lugar en el campo físico y no se podrá desarrollar.
Basta de frustraciones sosteniendo cosas, relaciones, emprendimientos sin forma y sin
nombre.
¿Cuáles son los frutos de tu crecimiento?
Aprende a apreciarlos, de lo contrario no vas a poder sentir satisfacción y nunca nada será
suficiente.
La vida es lo que hay y lo que tenes hoy, correte de las pretensiones y de las promesas y valorà
tu presente y en caso que no te guste, no pierdas tiempo en quejas y reclamos, cámbialo.
Recordá que vos sos el diseñador, el artista y el artífice de tu diario vivir.